¡Hola!
Estás aquí porque quieres lograr grandes cosas, tener éxito y convertirte en un jugador clave.
Sabes que la forma de lograrlo es siendo bueno para encender la colaboración con otros.
Sinceramente, es imposible hacer cosas grandes solo.
Quiero contarte cómo logré mejorar en esto.
Pasé de ser prácticamente invisible en los primeros años de mi carrera a:
Ser invitado como panelista en conferencias de Harvard y Wharton,
Convertirme en speaker de comunicación para equipos en Google, LinkedIn y Colgate en Manhattan, y
Ganar un concurso de oratoria en la Universidad de Pennsylvania.
Logré todo esto porque aprendí a llevar claridad a cada interacción con otros, especialmente con personas muy ocupadas.
Aquí te cuento cómo sucedió.
Antes
¿Sabes cómo se siente tu cerebro cuando acabas de despertar o cuando estás exhausto después de un día aplastante? Aturdido, disperso, incapaz de concentrarte.
Así me sentía yo durante mis primeros años de trabajo tras graduarme de Derecho.
Hace quince años, conseguí mi primer empleo formal como abogado para una empresa de retail en Monterrey, México.
Mi responsabilidad era revisar todos los contratos que firmaba la empresa, excepto los de bienes raíces.
Inicié con mucha energía e ilusión de tener impacto, pero pronto descubrí que era reemplazable.
Cualquier abogado corporativo podía hacer mi trabajo.
Además, me pedían constantemente que no destacara y que, en esencia, desapareciera.
Sabía que me pedían esto porque no era claro ni articulado al explicar ideas.
Por eso, me volví irrelevante. Y eso me frustraba profundamente.
Sí, ganaba lo suficiente para empezar a pagar mis préstamos estudiantiles, pero no obtenía nada más de ese trabajo.
Llegué a aceptar ese destino: mi rol sería siempre transaccional.
Luego
Pero un domingo, me levanté temprano y salí a caminar.
Pensé: ¿Sabes qué? Al diablo. No voy a tener una vida irrelevante. ¿Qué les diría a mis futuros hijos hipotéticos si algún día me preguntaran por qué acepté ese destino? (Si acaso tenía hijos, claro, jajaja).
En mi desesperación, empecé a contactar amigos para ver si alguien estaba en una situación similar.
Resultó que sí—en especial dos: Óscar y Gerardo, dos viejos amigos que también estaban luchando.
Los tres empezamos a pensar en cómo ayudar a jóvenes talentosos pero sin impacto real en el mundo de negocios. Sin apellidos ilustres, sin herencias decentes, sin amigos en el C-Suite.
Descubrimos que la clave era convertirse en mejores comunicadores.
Así nació Astrolab. Pero antes de ayudar a otros, debíamos mejorar nosotros mismos.
Cada uno empezó un camino propio. Te cuento el mío.
My camino
Aprendí que si quieres crecer, necesitas entender qué valoran los demás—sobre todo los líderes y tomadores de decisiones.
Y la respuesta fue clara:
Las personas ocupadas necesitan procesar mucha información rápidamente para tomar decisiones buenas y rápidas.
Esto requiere que tú lleves claridad a cada interacción.
¡Ahí estaba la clave! Si lograba hacerlo consistentemente, podrían empezar a tomarme en serio.
Me obsesioné con tres cosas:
Cómo encontrar rápidamente qué le importa a mi audiencia
Cómo destilar mis ideas en pocas palabras, ideas y diapositivas
Cómo transmitir con confianza
Durante la última década, eso he tratado de dominar.
Y conforme mejorábamos, empezaron a tomarnos más en serio.
Me invitaron a dar un par de charlas TEDx.
Nos invitaron a enseñar cada año en IPADE, la mejor escuela de negocios de LATAM.
Comenzamos a trabajar con C-levels de empresas multimillonarias como CEMEX, Sigma (Bar-S), C&A, Alpura y Citibanamex.
Hoy
Hoy soy responsable de expandir Astrolab en Estados Unidos.
Me mudé con mi familia a Filadelfia en 2022 para estudiar una maestría en Ciencias del Comportamiento en la Universidad de Pennsylvania, y después de graduarme, decidí quedarme aquí para convertir a Astrolab en una empresa internacional.
En los últimos dos años, grandes cosas han sucedido, y rápido.
- Me nombraron LinkedIn Top Voice por mis contribuciones a temas de claridad y storytelling.
- Fui invitado como panelista en conferencias de Wharton y Harvard.
- Facilité nuestro taller de storytelling para mis compañeros en UPenn.
- Y fui contratado para impartir talleres de comunicación y storytelling para equipos en las oficinas de Google NYC, Colgate y LinkedIn.
Pero el momento en que realmente entendí cuánto había avanzado fue el pasado mayo.
En una fiesta, a unos días de graduarnos, mis compañeros organizaron un evento de “superlativos” (macanazos, para el público hispanoparlante).
Después de varios premios como “el más probable de ganar un Nobel” o “el más probable de convertirse en profesor”, anunciaron:
Premio al Más Probable en Ser Orador de Graduación.
Y dijeron mi nombre.
Ahí entendí: había pasado de ser un profesional confundido y frustrado, a alguien relevante, escuchado y respetado.
Me había convertido en un jugador clave en mi comunidad y en mi industria.
De regreso
¿Te identificas con mi historia?
Creo que sí. Quieres lograr cosas grandes, dejar tu huella y poner tus talentos al servicio de los demás.
Quieres tener éxito, y sabes que el camino es encender la colaboración con otros.
La semana pasada, Óscar te habló de un nuevo taller diseñado para ayudarte a lograrlo.
Se llama Let’s Be Clear, y realizaremos la primera edición pública este marzo.
Let’s Be Clear te ayudará a:
Encontrar rápidamente qué le importa a tu audiencia
Destilar tus ideas en pocos conceptos claros
Transmitirlas con confianza
Así que, toma una decisión.
- ¿Quieres convertirte en un jugador clave, o quedarte en las sombras?
- ¿Quieres ser relevante, o seguir siendo invisible?
- ¿Quieres que te tomen en serio, o seguir siendo ignorado?
La decisión está en tus manos.
